Drenaje en Costa Azul sigue desbordando aguas negras

Desde hace seis meses, vecinos del fraccionamiento Costa Azul viven rodeados de drenaje a cielo abierto, olores que arden en la garganta y socavones que avanzan sin freno. En la calle Rafael Izaguirre, las aguas negras corren frente a casas, comercios y una escuela sin que CAPAMA Acapulco actúe, pese a múltiples oficios entregados.

Seis meses respirando infección a cielo abierto

Las familias de Costa Azul describen un escenario que se volvió rutina: fugas constantes, coladeras colapsadas y calles cubiertas de aguas negras. La escena se repite en Rafael Izaguirre, Niños Héroes, Horacio Nelson, Malpica y otras vialidades afectadas.

“Desde hace cinco meses tenemos que respirar este drenaje, hasta con materia fecal”, denuncia una vecina mientras muestra el flujo constante que baja por Rafael Izaguirre. La fuga, señalan, inició por la falta de una tapa en un pozo de visita; con las lluvias, las piedras bloquearon el conducto y el drenaje reventó en avalanchas diarias.

Los residentes explican que CAPAMA Acapulco conoce el problema desde el primer día. “Se hizo el recorrido con todos los directivos… y hasta hoy no se ha hecho nada”, reclaman en un video que circula entre colonos.

Socavones, fugas y abandono: el riesgo crece

En Rafael Izaguirre se formó un socavón profundo, con al menos dos cavidades huecas que amenazan con ceder. Las aguas negras ya alcanzan la escuela Marrón y corren también hacia Niños Héroes, multiplicando el riesgo sanitario.

Los vecinos aseguran que enviaron oficios a la presidenta municipal Abelina López desde el inicio de la emergencia. Sin embargo, la respuesta ha sido silencio. Mientras tanto, el drenaje sigue avanzando frente a casas y negocios, obligando a las familias a cruzar ríos de contaminación para entrar a sus hogares.

“Esto es necesario, es lo mínimo urgente que deberían atender. No podemos estar respirando esta infección todos los días”, insisten los moradores, quienes recuerdan que ningún municipio merece ser tratado con este nivel de abandono.

Entre el desastre y el derroche

El enojo crece porque, según los vecinos, el Ayuntamiento asegura no tener presupuesto para reparar tuberías, coladeras o drenajes reventados. Pero para conciertos, camionetas rentadas y eventos oficiales, el dinero aparece sin demora.

En medio de aguas negras, los habitantes cuestionan cómo es posible que coladeras colapsadas esperen meses mientras los gastos de promoción y espectáculos avanzan sin freno.

“Todo Costa Azul, seis calles del fraccionamiento, están saliendo a la calle todos los drenajes. Tenemos socavones en cinco calles. Usted tiene los oficios, presidenta. Ayúdenos, por favor”, clama una vecina.

Hasta el momento, no hay un comunicado oficial sobre el caso.

Costa Azul no exige privilegios: pide lo básico. Que las autoridades atiendan lo urgente antes de los espectáculos. Que el drenaje deje de ser paisaje cotidiano. Que Acapulco respire.