¿Otro robo? Abelina López derrocha 12.5 millones para “barrer” Acapulco

La administración de la presidenta municipal de Acapulco, Abelina López Rodríguez, enfrenta una creciente ola de críticas por presuntos actos de corrupción, desvío de recursos y despilfarro, que han agravado la crisis en el puerto.

Uno de los casos más graves es el presunto desvío de casi 900 millones de pesos destinados a la reconstrucción tras el huracán Otis en 2023. La Auditoría Superior del Estado de Guerrero detectó irregularidades en el uso de estos recursos, pero la alcaldesa ha rechazado transparentar los estados financieros y promovió un amparo para evitar la auditoría, argumentando que la instancia no tiene competencia para revisar dichos fondos.

Ante esta situación, la Fiscalía General del Estado interpuso una denuncia por ejercicio ilícito del servicio público, aunque la presidenta municipal se ha negado a separarse del cargo, asegurando que las acusaciones forman parte de una persecución política.

Recientemente, se filtró un contrato de arrendamiento por más de 12.5 millones de pesos con una empresa de Monterrey para el arrendamiento de maquinaria con el fin de “limpiar” la ciudad dentro del programa denominado “Paz, Honestidad y Corazón para la Construcción de Acapulco”. Ciudadanos y activistas han cuestionado este gasto, calificándolo como un despilfarro, especialmente en un contexto donde las colonias sufren carencias en servicios básicos como agua potable, electricidad y seguridad.

Además, la alcaldesa ha sido vinculada en diversas investigaciones con presuntos nexos al crimen organizado, lo que ha generado mayor preocupación en torno a la gobernabilidad y la seguridad en el municipio.

Estos hechos han deteriorado la confianza de la población en las autoridades municipales y evidencian una crisis institucional que demanda respuestas contundentes y transparencia. Organizaciones civiles y sectores ciudadanos exigen una investigación profunda para esclarecer los hechos y garantizar que los recursos públicos se utilicen de manera eficiente en beneficio de la comunidad.

Mientras tanto, Acapulco continúa enfrentando retos importantes en materia de servicios públicos, seguridad y desarrollo social, con una administración que lucha por recuperar la confianza perdida.