Exigen detener descargas de aguas negras en playas de Acapulco en pleno arranque vacacional

Prestadores de servicios turísticos alzaron la voz para exigir a las autoridades que pongan fin inmediato a las descargas de aguas negras en la bahía de Acapulco, una situación que se repite en plena temporada vacacional de verano y que daña la imagen del puerto y pone en riesgo la salud pública.

El martes por la mañana, una nueva descarga fue reportada en la playa Papagayo, justo entre el hotel Krystal Beach y los parianes. Un caudal de agua pestilente bajaba por la calle Gómez Morín hasta desembocar en plena Costera Miguel Alemán, dejando mal olor y residuos.

Días antes, otra descarga contaminante fue documentada en playa Hornos, donde brotaban aguas negras y espuma a la altura del canal pluvial ubicado bajo la calle Juan Sebastián Elcano.

Jesús Zamora Cervantes, presidente de la mesa de infraestructura del Consejo Consultivo de Turismo e integrante del Frente de Defensa de la Zona Federal Marítimo Terrestre, explicó que se ha notificado a la Capama y otras autoridades sobre esta situación. “Durante casi una semana hubo una fuerte corriente de aguas negras a un costado de Los Anafres”, denunció.

Según su testimonio, la respuesta de las autoridades fue que se trataba de trabajos de la Comisión de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento del Estado de Guerrero (Capaseg). Sin embargo, las descargas continúan sin solución visible.

“El problema es grave: inicia el periodo vacacional y colapsa algo, lo canalizan directo a ríos o canales pluviales que son naturalmente limpios. Esto es desesperante para los trabajadores, genera lama, olores, mosquitos. Es insostenible”, advirtió Zamora.

Además, criticó la ausencia del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) en las labores de limpieza y mantenimiento. “Solo hemos visto barrido manual y unos camiones, quien realmente está sacando el trabajo es la Promotora de Playas del gobierno estatal”, sostuvo.

Zamora hizo un llamado urgente a las autoridades locales, estatales y federales a dejar atrás las diferencias políticas y priorizar la franja turística, fuente de ingresos para miles de familias en Acapulco.